Atraque y Amarre

Docking and Mooring

Atracar y amarrar son unos de los aspectos más difíciles de la navegación. La tarea es difícil en aguas calmadas, pero cuando se añaden tráfico intenso, tiempo adverso y aguas revueltas se vuelve casi imposible.  

El amarre y atraque inadecuados de embarcaciones en áreas marinas y de rampas de botado, especialmente con mal tiempo, causa numerosos accidentes, lesiones y una cantidad significativa de daños a embarcaciones y propiedades todos los años. Hay distintos factores que deben tenerse en cuenta a la hora de decidir una técnica de atraque apropiada, incluyendo:

• Tipo y tamaño de la embarcación
• Cantidad de tráfico en el puerto
• Viento y corriente
• Capacidades y habilidad del operador de la embarcación

Las siguientes técnicas son adecuadas para el amarre y atraque de una embarcación.

Procedimientos Adecuados de Atraque y Amarre

A medida que el operador se aproxima al muelle, debe reducir la velocidad significativamente. Se deben asegurar las defensas del lado del muelle, y se deben preparar los cabos de atraque para su uso.

A la hora de atracar se deben tener en consideración la dirección del viento y la corriente. Estos factores tienen un efecto significativo al atracar. Siempre ese mejor atracar contra el viento si es posible.

Si el operador puede atracar la embarcación con el viento de frente, debe aproximarse al muelle en un ángulo pronunciado y girar la embarcación rápidamente. Si se debe atracar la embarcación en la misma dirección que el viento (por detrás), el operador debe aproximarse al muelle en un ángulo suave y dejar que la corriente ponga lentamente la embarcación en su sitio.

En marinas con tráfico denso, los operadores deben mantener la paciencia y el respeto a otros. Puede que haya un periodo de espera hasta que una de las plazas de atraque esté disponible. Los operadores deben aproximarse al área cuando una plaza de atraque esté abierta y cuando hayan indicado a otros operadores que están procediendo.

Los operadores deben tener siempre en cuenta el tipo y tamaño de la embarcación que están manejando. Estos factores pueden alterar la forma de maniobrar una embarcación al atracar y amarrar. Una embarcación de mayor tamaño, por ejemplo, es menos maniobrable que una más pequeña y ágil. Esto significa que una embarcación mayor necesita más espacio y tiempo para ajustar un rumbo de entrada. Igualmente, la forma de maniobrar puede ser diferente. La embarcación puede gobernarse con timón o con hélice. Cada método tiene sus diferencias y deben tenerse en cuenta al ajustar la dirección al amarrar o atracar.